Multilabores
El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón,
visitó ayer el Encuentro Internacional de
Multilabores Textiles ‘El Bierzo’, que este
año llega a la XV edición y en el que muestran
sus creaciones 24 expositores y 525
elaboran en vivo diversos trabajos con
las tácnicas más variadas.
El regidor ponferradino destacó
«la importancia del trabajo
se realiza con las manos»
Lillo..Manuel Quiroga Gallego
abiertos en la localidad que dan vida y valor añadido a este espacio rural.
Manuel Quiroga Gallego es uno de esos emprendedores que está
demostrando que, con conocimiento y trabajo,
se puede vivir y ganar dinero en el pueblo, lejos
del ajetreo de la ciudad. En Lillo haciendo una labor casi impensable
para muchos: la de atraer a cientos de propietarios particulares
de coches de la marca Porsche con el encargo de salvar o mejorar su Porsche.
Manu —como es conocido— creó la empresa Motorsport y hoy,
a sus 41 años, es un mecánico de referencia nacional,
reconocido por fabricar piezas o modelar coches Porsche
antiguos o nuevos, de los que ni el fabricante germano
vende los utensilios necesarios parar recuperarlos
por estar ya descatalogados.
Llama la atención que en Lillo del Bierzo se ubique
este santuario mecánico de los Porsche. Sin embargo,
al llegar al pueblo y preguntar por el taller, a los vecinos
ya no les causa sensación: «¡Ah, sí. Manuel, el de los Porsches,
siga esa calle hacia arriba y allí lo encontrará!», me indican,
como si también fuera tan normal como instalar
en Peranzanes una factoría de la Volkswagen.
Manuel Quiroga es de Lillo, estudió Técnico en Mecanizados
en el Ipove de Ponferrada, la histórica Sindical.
Con 22 años empezó a trabajar. Durante 8 años se dedicó
fabricar piezas en mecanizados, de coches y de otros
servicios de instalaciones mineras. Trabajó en Ponferrada
para Luncor, Socin o en Técnicas Mecánicas del Bierzo,
en sus comienzos cerca de la ITV.
En el 2005, Manuel compró su primer Porsche, un 964.
Un tío de él, que trabajó 40 años en la Volkswagen de
Barcelona, le inoculó la pasión por la mecánica y
la ingeniería alemana. «Él siempre venía a Lillo de
Alemania con Porsche y al final pasó esto; yo estaba
trabajando, pero lo mío era la mecánica. Salía de trabajar
y siempre andaba enredando con los coches, y
con el primer Porsche lo desmonté y lo monté unas
cuantas veces: los hay de carrocería estrecha y los anchos,
los Turbo, que viene 8 centímetros más ancho, y ese
coche yo lo hice ancho», explica. Compró de aquella en
el concesionario de Porsche en Vigo piezas,
como aletas y defensa, y lo transformó.
Ese coche fue lo que le abrió las puertas a su especialización.
Cuando Manuel se desplazaba a las concentraciones
de la marca, que se organizan por toda España y en
el extranjero (no se pierde ferias alemanas de referencia),
sus colegas de gustos se fijaban en su vehículo. Llamaba la
atención, dado que además de la mecánica, Manuel domina
el manejo de la chapa. «La cosa fue a más», y así
fue como levantó el flamante taller de Lillo.
A su recinto acuden particulares de Portugal, de
España y hasta de Suecia, un asturiano
que le confía las reparaciones.
CIRCUITO SOBRE MINA
Manuel es además una de las personas que ha propuesto aprovechar la
clausurada mina a cielo abierto de la Gran Corta de
Fabero y convertir una parte en un circuito. Tienen hasta
un estudio de costes de asfaltado por kilómetro y en
el Ayuntamiento han acogido muy bien la idea, hasta
el punto de que figura en el programa electoral. Este
emprendedor no entiende de política y dice que
sería necesario unirse todos y apostar por ese circuito..
Lobos
La Xunta cuantifica el número de ejemplares
en medio del debate sobre su conservación
La frontera del Bierzo con Galicia concentra
hasta una decena de manadas de lobos, según
el último estudio elaborado por la Xunta.
En la comunidad vecina ha vuelto a reabrirse
el debate sobre si las batidas son la opción idónea
para controlar una especie siempre en el ojo del huracán.
De momento, la Consejería de Medio Ambiente
gallega entiende que las «medidas preventivas»
son la mejor solución para controlar los ataques
al ganado. En la comunidad gallega hay unas 60 manadas en total.
Aunque el Bierzo no tiene una serie propia en
el balance que hace la Junta de Castilla y León, en
la memoria de 2017 se estableció que, al menos existen
hasta 8 de las 54 manadas controladas en la provincia.
Según esa misma memoria, la última publicada
en la página web de la administración autonómica,
la mortalidad no cinegética de la especie incluyó
tres casos en el Bierzo: uno por muerte natural en Peranzanes,
otro por un atropello en Candín y otro por un disparo
en Folgoso de la Ribera. Ese año, los cotos del Bierzo
tuvieron un cupo de cuatro lobos para abatir.
En el Bierzo hay ataques pero no se han convertido
en un tema de polémica, al menos de cara a los medios
de comunicación, como ocurre en provincias como Ávila.
Las organizaciones ganaderas sí apuntan a la necesidad
de establecer mayores compensaciones por los ataques.
La norma en Galicia data de 2008 y establece diversas
medidas de prevención y control ante los daños
millonarios que provocan estos animales sobre
las explotaciones ganaderas de la comunidad vecina.
En Castilla y León, el número de ataques de lobo
al ganado comunicados a la Consejería de
Fomento y Medio Ambiente correspondientes al año 2017
ascendió a 1.989, y el número de cabezas muertas fue de 2.982,
correspondiendo 1.716 cabezas a ganado mayor
(en su mayoría ganado vacuno),
y 1.266 a ganado menor (en su mayoría ganado ovino).
Estas cifras supusieron, a juicio de los responsables del gobierno
autonómico, «una estabilización» en el número total de ataques
respecto a los datos registrados en el año anterior y un descenso
en cuanto al número de cabezas totales muertas, si bien el
comportamiento es notablemente
diferente en función del tipo de ganado
No hay comentarios:
Publicar un comentario