# Operación barro... Sánchez prefiere a cualquier basura antes que a la oposición"..Carlos Herrera ha repasado la actualidad del día en su monólogo de las 8 de 'Herrera en COPE'. Hoy el comunicador ha recordado las mentiras de Pedro Sánchez tras dos años de Gobierno desde la moción de censura de Rajoy. Y por otro lado, ha hablado de los pactos a los que ha llegado con algunos partidos. ....Vídeos 2...Podemos busca mantener la polarización y la crispación" TRECE.!!!!!

La oposición no es el problema de España

Para explicar las razones se requeriría una tesis doctoral (y no de las de corta y pega). Pero lo cierto es que el PSOE, guste o no, es el estado electoral natural de los españoles (mi humilde tesis es que el llamado «progresismo» se ha convertido en el estándar ideológico español porque el liberalismo nunca ha dado aquí una batalla intelectual y mediática por el público y porque la izquierda, intervencionista y de rostro seudoprotector, es lo que más se parece al estatismo paternalista del franquismo, que ha calado en la psique colectiva).

Desde la Constitución del 78 hasta hoy, UCD gobernó cuatro años; el PSOE, más de 22; y el PP, 14 y medio. Una singularidad de España es

 que el centro-derecha solo logra derrotar al socialismo en trances excepcionales. González cae en 1996 desacreditado por la corrupción y magullado por la crisis de 1993, que se tradujo en que al final de su mandato hubiese un 22,8% de paro. El otro presidente del PP, Rajoy, logra su mayoría absoluta de 2011 también ante una emergencia, con el país yéndose al garete por un tsunami que Zapatero se negó a ver. Repasando la serie electoral cabe extraer una conclusión: «Si no pasa nada especial, aquí gana el PSOE». Un principio que se ha reforzado al dividirse en tres el voto «no izquierdista».

Ante tal panorama, el principal partido de la oposición debe recetarse paciencia y unidad. La ropa sucia conviene clarearla en el vestuario, porque como advierte una sagaz máxima cínica, «lo malo de la autocrítica es que los demás se la creen». El PP actúa por momentos como si fuese a haber elecciones mañana, cuando lo cierto es que Sánchez vive por y para el poder y aguantará atornillado en La Moncloa tres años, aunque el país se caiga a cachos.

Casado es el líder del centro-derecha que más difícil lo ha tenido, por una pura razón aritmética: la existencia de Vox, un partido populista con garra que le resta votos en su flanco derecho. Esa novedad lo obliga a mantener un complejo equilibro entre el empaque propio de un partido de Estado y la necesidad de tener un poli malo que sacuda a PSOE y Podemos, rol que ahora mismo ejerce Cayetana, pues el tono irónico que ha adoptado Teodoro no funciona. El Gobierno, maestro de la propaganda, ha iniciado su Operación Barro, burda, pero eficaz. Consiste en aguijonear a la derecha para que salte y se embarre la cancha. Mientras se hable de exabruptos partidistas no se hablará de la mala gestión de la epidemia, las colas del hambre y cómo el Ejecutivo pisotea la buena praxis democrática aprovechando un estado de excepción (que es lo que ha sido). Casado ha de esquivar la tangana y poner al PP a hablar a tiempo completo del problema real, que ya no es la epidemia, sino la crisis de caballo que afrontamos con un Gobierno que nos va a arruinar. En julio, el PP va a barrer en Galicia con una política de centro y de gestión. Caminando por ahí, Casado puede ser presidente dentro de tres años y medio, porque la recesión desarbolará a Sánchez. Lo que no está tan claro que los desahogos para los muy cafeteros renten en las urnas.

ERC anunció ayer que en julio volverá la mesa para la autodeterminación de Cataluña. La oposición no es el problema....Luis Ventoso

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