Las carreteras de la comarca del Bierzo han vuelto a registrar accidentes de tráfico. En esta ocasión, tres hombres y una mujer de entre 30 y 49 años resultaron heridos la noche del pasado viernes al sábado en sendos accidentes de tráfico registrados en la autovía del Noroeste A-6 a su paso por la comarca del Bierzo, según informaron desde el Servicio de Emergencias 112.
El primero de los incidente ocurrió a las 21.08 horas del pasado viernes a la altura del punto kilométrico 371, en sentido Galicia, en el término municipal de Bembibre, donde los efectivos sanitarios atendieron a un hombre de 49 años al que se dio de alta en el lugar y a una mujer de la misma edad, que fue trasladada en ambulancia de soporte vital básico al Hospital del Bierzo de Ponferrada.
El segundo de los siniestros se registró a las 23.56 horas del mismo viernes en el kilómetro 375, sentido Madrid, en Congosto, donde resultaron heridos dos hombres que fueron trasladados al mismo centro asistencial en ambulancia. En este caso el accidente de tráfico también se producía en la autovía del Noroeste.
Stac
La empresa de Carlos Vega cumple dos años y estrena una línea de producción con la que llegará a 170 empleos en 2020.
Carlos Vega es un empresario del Bierzo que inició su andadura empresarial en Padrón, en Galicia, y que ahora mismo desarrolla, en las antiguas instalaciones en La Rozada de Vitro Cristalglass, el sueño de su vida. Stac se dedica a las bobinas de aluminio, acaba de poner en marcha una nueva línea de producción y aún quiere crecer más. Ya piensa incluso en un nuevo proyecto, aún por desarrollar...—
¿Cuándo arrancará la nueva línea de producción?
Efectivamente, Stac arranca una nueva línea de producción. Es una línea para pintar bobinas de aluminio, de modo que tendremos en el Bierzo la línea más grande y más moderna de Europa, cuyo montaje iniciamos hace aproximadamente 10 meses y a día de hoy nos encontramos arrancando y con su puesta en marcha. La verdad es que me siento orgulloso de tener en el Bierzo una línea como ésta para satisfacer las necesidades y las novedades del sector a nivel mundial.
—¿Y en qué consiste?
—Se trata de una línea de producción de más de 190 metros de largo, con una capacidad productiva para poder pintar hasta 30.000 toneladas de bobinas de aluminio anuales y hasta un ancho de 2 metros, única en Europa. Esta línea de pintado de bobina nos permitirá pintar cualquier color y poder ofrecer una amplia gama de acabados especiales tales como acabado madera, piedra, mármol, pátinas... Se trata de una línea de última generación y completamente automatizada que supone una inversión superior a los 15 millones de euros.
—¿Cuántos trabajadores tiene ya Stac y qué previsión tiene a corto y medio plazo?
—Durante el 2018 llegamos a alcanzar los 120 empleados, sin hacer ruido y solo un año después de haber iniciado la actividad en 2017. A día de hoy y con la arrancada de la nueva línea de pintado de bobinas estamos en los 130 trabajadores. Inicialmente arrancará con un turno, aunque el objetivo es ponerla a tres turnos lo más rápidamente posible, puesto que son líneas en las que las arrancadas y paradas son muy costosas y la rentabilidad pasa por mantener la producción 24 horas al día. Para ello procuraremos producir con el menor coste, una buena calidad y el mejor servicio lo más urgentemente para abrir nicho de mercado y poder tenerla a finales de 2019 o durante 2020 a tres turnos.
En el mes de junio iniciaremos el montaje de una nueva línea de corte y transformado de bobinas ya pintadas de aluminio que espero terminar de montar a finales de este año, de modo que para esa fecha estaremos en torno a los 150 trabajadores, pudiendo llegar durante 2020 a los 170.
—¿Dónde van destinados los productos de Stac?
—Stac es una empresa relativamente joven; inicié la actividad en 2001 con solo 6 trabajadores y hoy, 18 años después, pasamos de 480. Cerramos el 2001 con una facturación entorno a los 500.000 euros y en 2018 nuestra facturación superó los 90 millones. Eso significa que somos una empresa activa, inquieta y con planes de expansión. Espero seguir con este ánimo de crecimiento aquí en el Bierzo, siempre y cuando no haya nada que genere desánimo, puesto que este es el factor principal para poder seguir creciendo y reinvirtiendo.
El producto que fabricamos en Stac es bobina de aluminio pintada y panel composite Stacbond para revestimiento de fachadas ventiladas tan apreciada por los arquitectos debido a la alta eficiencia energética que aporta a los edificios, el poco peso que tiene y por ser un producto tan creativo, también tiene una gran demanda en el mundo de los rótulos y la imagen corporativa.
Durante 2018 llegamos a vender en 68 países, principalmente de Europa, África y América del Sur. El objetivo para este año, y en ello estamos, es consolidar nuestro producto en Norteamérica de modo que tendríamos abarcado prácticamente todo el mundo excepto Asia. El mercado asiático está lejos de ser un mercado interesante para nosotros ya que desde allí exportan a nuestro mercado, con un producto de menor calidad y más competitivo en precio puesto que no son comparables las condiciones de fabricación y medioambientales.
—Stac cumple dos años desde su aterrizaje en el Bierzo. ¿Está satisfecho?
—Pues sí, la verdad es que estoy contento de haber venido a esta que es mi tierra. Aunque es difícil crecer a buen ritmo y sobre todo partiendo de cero, tanto en instalaciones como en personal, en un proyecto que supone un desarrollo industrial de 60.000 metros cuadrados como ha sido en nuestro caso y con la implantación de 4 líneas de producción.
A día de hoy estoy terminando de consolidar un equipo humano capaz, con buenas aptitudes y actitudes, del cual hoy me siento contento y orgulloso, puesto que en un mundo tan global y competitivo como en el que vivimos se hace imprescindible. El Bierzo es buena tierra, tiene buena gente y me siento satisfecho de poder contribuir con la generación de empleo y el desarrollo económico de una comarca tan castigada por la destrucción de empleo, sobre todo empleo que proviene del mundo rural. Como ya sabemos, la despoblación de los núcleos rurales es un gran problema no solo aquí sino nivel nacional. Un porcentaje muy importante de la plantilla de Stac proviene de núcleos rurales, por lo que me siento satisfecho de poder contribuir a frenar este problema.
—¿Tendrá algún pero?
—Por poner un pero, y aprovecho para hacer un llamamiento a las administraciones pertinentes, he de decir que necesitamos mejorar la red de comunicaciones al Bierzo: a veces me cuesta traer clientes a que visiten nuestra fabrica, moderna y actualizada, por la falta de un mejor servicio en las comunicaciones. Por poner un ejemplo, desde que el cliente aterriza en Madrid tengo que llevarlo a la estación del Ave, desde allí a León y cogerlo en un coche y trasladarlo al Bierzo: esto es un freno para el crecimiento industrial del Bierzo y para el fomento de la exportación. El Bierzo necesita un acceso directo ferroviariamente desde Madrid puesto que a día de hoy en coche se tarda más de 4 horas.
—¿Tiene nuevos planes de futuro en el Bierzo?
—Como ya comenté, nuestra ilusión y nuestro ánimo es grande para poder seguir creciendo. A pesar de mezclar las obras, instalaciones y producción hemos crecido durante el 2018 un 30% en nuestras ventas, que es un crecimiento casi imposible, y hemos pasado de tener presencia en 52 países a 68. Lo cual hemos conseguido a base de reinvertir e hipotecándonos. En nuestro ánimo y nuestra mente está la creación de dos nuevas líneas de negocio (que generarían entre 30 y 50 empleos) y que perfectamente podrían instalarse en el Bierzo, pero la verdad es que a día de hoy no tengo claro si aquí en el Bierzo o en otro territorio. De momento vamos a consolidar las que tenemos en la actualidad.
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