No Al Olvido

lunes, 1 de abril de 2019

# La libertad...Hay días que me pregunto cómo sería poder vivir tranquilo....Vídeos..Sánchez disimula su plan revelado por Iceta--!!!!


Me he comprado un patinete eléctrico. Israelí, como la libertad. Un patinete contra el chantaje taxista y contra la vergonzosa complicidad con que Ayuntamiento y Generalitat permiten que los barceloneses seamos tomados como rehenes por cualquier imbécil. Me he comprado un patinete eléctrico israelí, como la libertad, como la alegría de vivir aunque sea bajo el asedio de unos vecinos salvajes; un patinete para acariciar la piel suave de mi ciudad, «mig del sol, mig de la lluna» y que continúa siendo sexy a pesar del resentimiento y el atraso de mi alcaldesa demencial. Un patinete para que también mi ciudad me acaricie a mí, y me haga sentir esbelto, casi ingrávido, de vuelta al paraíso extraviado, qué extraña y breve fue la juventud. Un patinete arrogante, silencioso, limpio, divertidísimo: es El Bulli de los patinetes, «au dessus» de las baratijas chinas. Un patinete individual, individualista, estiloso, potente, caro, para recordarme que aún tengo la vida y soy libre de dar mi dinero y mi amor y mi escritura a quien quiera. Contra independentistas, feministas, taxistas, cabifyistas y vegetarianas que me usaron como carnaza, mi patinete y yo somos la respuesta de vida y libertad a la turba tirana. Soy un héroe clásico revisitado, laurel y jazmín. No corta el arcén sino vuela mi patinete Inokim.
Y aunque escribí contra el carril bici, en favor de los autos y de la gasolina, no hay nada más urgente que la libertad; y aunque sentí desprecio por los patinetes antes de conocerlos, ahora que mi patinete y yo estamos escribiendo la novísima oda a Barcelona, solemnemente afirmo que no hay nada más de derechas que lo silencioso y lo limpio, la velocidad y la luz y la audacia. Si Marinetti volviera de visita a la Tierra preferiría un patinete a la Victoria de Samotracia.
Encaja mi patinete en mi carácter, en mi sentido. Y no ignoró el peligro de cometer un error, o que un coche lo cometa y me lleve por delante. Es algo que también pienso cuando escribo y hay días que me pregunto cómo sería poder vivir tranquilo.,...Salvador Sostres

No hay comentarios:

Publicar un comentario