La portavoz
de Podemos se ha ido gustando a medida que avanzaba su discurso, en el
que ha mezclado corrupción, populismo, feminismo y hasta franquismo. “Su
tiempo ha acabado”, ha proclamado.
Irene Montero ha sido la encargada de levantar el telón de la función teatral que este martes Podemos ha llevado al Congreso con una moción de censura sin más apoyos que los suyos propios. Ni siquiera con los de Compromís cuentan.
La portavoz morada ha hilado un discurso muy duro contra el Partido Popular que ha despertado los primeros aplausos en la bancada de Podemos
-algo fría aún- al acusar a los populares de practicar el "machismo",
el "elitismo mediocre" y de tener "un proyecto servil a las élites".
Pablo Iglesias ha escuchado con atención a Montero
desde su escaño, rozando el éxtasis en algunos momentos, mientras ésta
decía: "España está harta de que ustedes les roben y la democracia pide
paso", "ustedes tratan a España con la misma arrogancia que me están
tratando a mí ahora" y "la corrupción tiene sede, Génova 13".
"Su tiempo ha acabado", ha proclamado Montero,
que se ha ido gustando a medida que transcurrían los minutos y ha
llegado a exclamar: "Esta moción de censura es feminismo". Pese a que el
candidato que propone Podemos es un hombre; es el hombre de Podemos.
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MRF
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