Xavier Trias i Vidal de Llobatera és un pijo de la zona alta de Barcelona que s´ha passat la vida llepant de la política. Estudió en el San Ignacio y se hizo comunista. Luego se convirtió al nacionalismo y veneró a San Pujol.
En
2011 Trias fue el alcalde de Barcelona con menos concejales (15) de la
democracia, y quizás el peor alcalde de la Ciudad Condal de los últimos
200 años. La seva gestió no ha deixat pas memòria. Tan ciega fue su lealtad de apparatchik que incluso se hizo separatista. En una declaración esperpéntica, llegó a decir que no era separatista que pero que votaría a favor de la secesión. Va entregar la ciutat als fanàtics de l´ANC i l`Ómium/bÒdrium/Òdium, que van fer de l´abans dinàmica Barcelona el seu ninot, el seu abocador d´odi. Como un vulgar cupero, mandó arrancar la placa en honor a la Constitución que llevaba 180 años colgada en la fachada del Ayuntamiento. Gracias a eso -y a su gandulería, y a sus enchufes– perdió la alcaldía en las primeras elecciones de turno. No le votaron ni sus hermanos. Su posicionamiento extremo nacionalista (a los empresarios y conocidos que se lo recriminaban les espetaba: “teniu por”)
impidió que miles de Barceloneses de centroderecha assenyat lo
consideraran como una opción para concentrar votos ante la nueva extrema
izquierda de Colau. En Sarriá-San Gervasio perdió 7 puntos.
Hace un par de años su esposa Puri Arraut Amat, castellanohablante y dentista, explicaba a sus pacientes que lo del separatismo era para “negociar mejor con Madrid”.
Trias es ahora un simple, aburrido, envejecido y desmotivado concejal que alarga
lo que puede sus vacaciones en Menorca -lo invitan a alguna exposición
en Ciudadela- y se pasea desgarbado por eventos y festejos. El pasado
junio se fue a Sevilla para salir de copas con los malvados “aspanyols“.
Sembla
que en Trias ha canviat d´amics. Ayer Trias dio un mitin separatista en
San Pedro de Ribas. Le acompañaba el zamorano de la CUP David Fernàndez Ramos (sisplau neteji l´espardenya suada al catalanitzador de cognoms) y le enmarcaba una enorme cubana igualita a la que acompañaba a los terroristas de Terra Lliure hace unos años.
Mientras Trias apoyaba a la CUP y al separatismo, las juventudes de la CUP colgaban en Sabadell un cartel llamando a “señalar” a los malos catalanes, entre ellos Jordi Pujol y Artur Mas, els amics d’en Xavier:
O sea: los separatistas de la CUP
“señalando” como traidores a los amigos de Trias, y Trias haciendo de
ventrílocuo del separatismo en un acto con la CUP. Molt bé Xavier. Así cuando montéis el Maidán separata y empiecen “les hòsties que pariran terror“,
tus amigos de la CUP te respetarán la vida y la propiedad, Puri podrá
seguir pasando consulta y tus hijos no tendrán nada que temer.
¿Hipocresía?¿Chaqueterismo?¿Cobardía? ¿O sólo estupidez? Tal vez todo a la vez.
Y así, amigos, acaban los pobres hombres.
Dolça i covarda Catalunya…
https://www.dolcacatalunya.com/
MRF
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