La televisión pública catalana salió al rescate de Joaquín Forn y del mayor de los Mossos cuando ambos estaban acorralados y teniendo que reconocer que efectivamente existió alerta de la CIA
Por más que Joaquín Forn hablara en rueda de prensa de un "montaje político" con epicentro en Madrid, tal fue el ridículo que él y Josep Lluís Trapero estaban haciendo que TV3 optó por cortar por lo sano. O por las bravas.
Los presentadores del programa Els Matins habían anunciado que a las 12 conectarían con la Consejería de Interior para ofrecer en directo la comparecencia de Forn y Trapero.
En plató estaba el consejero de Presidencia y portavoz del Govern, Jordi Turull, que iba a ser entrevistado después de la comparecencia de su compañero de Interior, para reforzar la versión de la Generalitat.
Cuando ésta empezó, TV3 conectó en directo. Pero durante sólo unos minutos. Cuando Joaquín Forn se vio acorralado y hubo de reconocer que la Generalitat no dio credibilidad a la alerta sobre Las Ramblas llegada de Estados Unidos, la televisión pública catalana cortó la emisión en seco.
En ese momento TV3 optó por continuar la entrevista a Turull en plató para arreglar el desaguisado y desviar la atención hacia cuestiones relacionadas con el referéndum ilegal del 1 de octubre y lo malo que es el Estado español.
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MRF
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