El caso trae cola. Desde hace más de un año la Asociación de Restaurantes del Bierzo que preside Ángela Figuero, ha venido denunciando casos de establecimientos de hostelería que carecían de licencia para actuar. Algunos de ellos atendieron a los requerimientos, pero otros no. Según contaba ayer a este periódico la propia Ángela Figuero, uno de estos negocios dedicados a dar banquetes y que fue precintado fue el Jardín de Vikera y desde entonces su responsable ha venido culpando a los integrantes de la asociación.
«La última persona con la que la ha tomado ha sido conmigo; y ha ido a buscarme cinco veces, que yo tenga constancia, tanto al trabajo como a mi casa», explicaba Figuero, consciente de las amenazas y del temor al tener un hijo de corta edad.
Así, el viernes 7 de julio aparece pintada la entrada de su piso de Ponferrada con frases insultantes y amenazantes. El 8 de julio, esa misma persona fue al hotel que dirige la presidenta de la asociación de restaurantes y allí, haciéndose pasar por policía nacional, requirió a la directora, dándose la circunstancia de que no se encontraba en el local. Con posterioridad, aparecen en la misma entrada de su casa otras pintadas en color negro, después de que la mujer saliese de madrugada de denunciar en comisaría las amenazas. Las primeras pintadas fueron hechas con pintura de color rosa. Esa misma persona denunciada llamó a su puerta y le atendió alguien del servicio doméstico, a la que le dijo que traía un paquete para Ángela Figuero, pero ésta tampoco se encontraba en casa en ese momento. Así, hubo testigos del edificio donde vive que vieron al denunciado y acto seguido comprobaron los efectos de la pintura en las paredes del rellano. Incluso, con posterioridad, aparecieron otros daños en la misma comunidad.
Así las cosas, la policía finalmente intervino y detuvo al responsable del Jardín de Vikera, R.P.B., que pasó la noche del domingo 9 de julio en la comisaría, puesto en libertad el lunes con cargos tras prestar declaración.
Está acusado por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Ponferrada por daños y usurpación de funciones públicas. El abogado de Figuero, Manuel Casero, entiende que también hay delito de amenazas, injurias y calumnias.
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Un incendio forestal declarado durante la tarde del lunes ha acabado calcinando cinco hectáreas de matorral y choperas en la zona de La Martina, a las afueras de Ponferrada, según la información facilitada ayer por la Junta de Castilla y Léon, que movilizó al helicóptero de Cueto, una cuadrilla helitransportada y otra de tierra, además de dos agentes medio ambientales para sofocarlo poco antes de que cayera la noche.
Ponferrada también sufrió otro incendio cuya superficie ayer estaba por determinar. Y en la localidad de Lomba, en Benuza, un vehículo autobomba y un agente medioambiental se bastaron para sofocar otro fuego que apenas quemó unos metros cuadrados.
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Seis jóvenes —cinco chicas y un chico—de entre 19 y 22 años de edad ha resultado heridos después de que los dos vehículos que ocupaban chocaran por circunstancias que se desconocen. El accidente tuvo lugar sobre las 21.40 horas de la noche en la carretera local 158/ 10 a las afueras de Camponaraya y en dirección a la localidad de Narayola, según informó el servicio de Emergencias del 112.
Los heridos, trasladados todos al Hospital del Bierzo en una ambulancia de soporte vital básico, son cuatro chicas de 20 años C.F.G, P.G.L, A.L.P. y A.G.A, otra joven de 19 años, T.F.L y un varón de 22 años que responde a las iniciales J.L.C.P.
La sala del centro de emergencias del 112 en Castilla y León se encargó de avisar a la Guardia Civil y a las asistencias del servicio de Sanidad de Castilla y León, además de a personal de Atención Primaria del centro de salud de Cacabelos. Los vehículos implicados presentaban un impacto froto-lateral en el lado del conductor, por un lado, y un impacto lateral del lado del conductor por el otro.
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La Junta formará a 24 canteros y restauradores del patrimonio
La restauración del patrimonio, con obreros especializados en labores de cantería, y la hostelería, son las dos nuevas líneas de empleo hacia los que el Ayuntamiento de Ponferrada ha propuesto orientar los nuevos talleres de empleo que financie la Junta de Castilla y León en el municipio la próxima temporada. La propuesta ha sido bien recibida por el consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo, que ayer visitó junto a la alcaldesa, Gloria Fernández Merayo, a los alumnos de la Escuela Taller Ponferrada IV, todavía activa, y que entre otros trabajos se encarga de reformar la calle La Estafeta, a los pies del Castillo.
Carriedo adelantó que la petición municipal va en la línea de lo que busca su Consejería para los talleres de empleo, de 24 trabajadores en formación durante nueve meses y con un presupuesto que ronda el cuarto de millón de euros. «No podemos seguir dando la misma formación que hace diez años. El mercado nos demanda cosas distintas y que un ayuntamiento se replantee nuevas formaciones y certificados nos gusta mucho», afirmó, con independencia de que los talleres que se han impartido hasta ahora hayan sido un éxito.
Carriedo y Merayo informaron de las nuevas propuestas en el interior del Castillo de Ponferrada. La de restaurador del patrimonio y experto en cantería «es una acreditación profesional que le va a venir muy bien a personas de Ponferrada porque tenemos mucho patrimonio histórico que restaurar», aseguró la alcaldesa. No menos importancia le dio Merayo al «nuevo yacimiento de empleo» que supone la formación de personal para el sector de la hostelería en una comarca que cada vez recibe a más turistas y precisa un servicio profesional.
La Junta recordó ayer en una nota que el Programa Mixto de Formación y Empleo que financia las escuelas taller, dirigida a trabajadores desempleados «es una forma útil de reinserción laboral», que implica también a las entidades locales. La Consejería de Empleo asegura que un 47 por ciento de los alumnos que ha participado en alguna de las escuelas taller ha logrado encontrar después un empleo. Los alumnos está contratados a jornada completa por la entidad promotora —en este caso el Ayuntamiento de Ponferrada—, al igual que los docentes que les imparten la formación teórica y práctica. Los alumnos realizan además obras o servicios de utilidad pública, como es el caso de la reforma de la calle Estafeta, donde 24 trabajadores en tres turnos culminan la obra. El taller Ponferrada IV también ha actuado en la Biblioteca Municipal, la Oficina de Turismo, el Castillo, el colegio de La Placa y el paseo del Río.
La Junta también recordó que los 24 alumnos de la escuela taller Ponferrada V Duplo, ya finalizada, ha actuado sobre zonas verdes degradadas de la ciudad y en la recuperación de la red hidráulica de Las Médulas a su paso por el municipio. En ambos talleres, la Consejería ha destinado 460.090 euros para su financiación.
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MRF
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