Con el PP
grogui, el exsecretario general del PSOE se frota las manos en medio de
la Operación Lezo e intenta dar órdenes al grupo parlamentario. Claro
que no le van a dejar.
Tal como adelantó ESdiario hace cinco días, la Operación Lezo va a ser uno de los puntales de la campaña de Pedro Sánchez para las primarias del PSOE. Y parece que el exsecretario general está dispuesto a aprovechar el último caso de corrupción que ha salpicado al PP para pasar la factura a su gran enemiga interna, Susana Díaz, y al ideólogo de la abstención en la investidura de Mariano Rajoy, el presidente de la Gestora socialista, Javier Fernández.
De hecho, este mismo martes Sánchez ha remitido a Fernández una carta en la que exige una "actuación contundente del PSOE" contra el Gobierno del PP. "La envergadura de las tramas, la financiación irregular del PP
que toca a la mayoría de sus federaciones y a sus exigentes más
significativos exige de una actuación contundente por nuestra parte",
afirma Sánchez.
Esta es la carta que le he enviado a @javier_asturias. Las novedades en torno a la corrupción del PP exigen la comparecencia de Rajoy.
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