El Partido Popular da prácticamente por perdido el Gobierno de la Región de Murcia. Están seguros de que Ciudadanos ya ha decidido apoyar la moción de censura presentada por el PSOE y ayudará en consecuencia a que tras el triunfo de dicha moción contra el presidente Pedro Antonio Sánchez se forme un Gobierno alternativo con los socialistas y Podemos.
Este Gobierno no durará desde luego más
allá de un año, quizá ni siquiera siete meses, y convocará elecciones
anticipadas, eso es lo que el PSOE le ofrece a C's.
Éste es el escenario que está produciendo un conflicto interno en el propio Partido Popular
murciano, muchos de cuyos miembros más destacados se quedarán
literalmente en la calle el próximo día 6, en la tarde en que la
izquierda se haga cargo de la gobernación de Murcia con la ayuda
inestimable del partido de Albert Rivera.
El conflicto está larvado pero en este
momento las presiones que sufre la dirección del partido en Madrid
apuntan a que ceda a las pretensiones de Ciudadanos de
cambiar el presidente y así evitar la laminación de todos los cargos
altos e intermedios que ahora mismo todavía pueblan la Administración
regional.
El PP sigue teniendo línea abierta con C's
El PP está abierto a cualquier actitud de acuerdo con Ciudadanos
siempre y cuando éste no imponga condiciones inasumibles. En las
últimas horas se ha deslizado una especie que no resulta verosímil y es
que se produzca un pacto para la dimisión de Sánchez y su posterior reposición en el cargo siempre y cuando éste quede exonerado de responsabilidades penales.
No parece sin embargo que el cambio de
presidente se vaya a producir, sobre todo porque en Génova se piensa que
existen posibilidades muy ciertas de que el juez instructor del llamado
caso Auditorio archive la causa contra Pedro Antonio Sánchez.
Las noticias que se tienen, escasas pero
certeras, procedentes del Juzgado apuntan en esta dirección pero se sabe
también que la decisión del juez no se atemperará a los tiempos
políticos y que incluso es posible que no se conozca hasta después de
Semana Santa, cuand el nuevo gobierno entre la izquierda apoyada por Rivera y su partido, ya esté constituido.
Ciudadanos ha preferido, como afirman en la dirección del PP, “atizar una patada a Rajoy en el culo de Sánchez” aunque se expone a quedar muy desautorizado si al fin el juez exonera a Sánchez
de toda responsabilidad. Fuentes de todo crédito sugieren que sin
embargo sí se pueden observar irregularidades administrativas en los
expedientes que ahora mismo examina el Juzgado.
En resumen: el PP se quedará sin una de las pocas autonomías que le quedaban, un golpe político que sin duda afectará al partido de Rajoy que, en todo caso, sugiere que si todo ocurre como lo descrito en las próximas elecciones el PP recuperará la mayoría absoluta que le ha acompañado durante tantos años. Ciudadanos,
ya se sabe, opina que con la nueva reglamentación electoral en la
Región será imposible en los sucesivo cualquier mayoría absoluta sea
ésta del color que fuere.
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